Mitos y Leyendas

En primer lugar quiero pedir disculpas por esta ausencia, por problemas personales y 'técnicos' nuestro barco ha estado amarrado en puerto durante un tiempo... pero volvemos a la mar señores, espero que lo disfruteis, gracias por acompañarme un año más en esta aventura. Son ya dos años y medio el tiempo que ha pasado desde que este barco se creó y tomo un rumbo: explorar la historia del pasado.
Sois muchos los que estais, los que estuvisteis y los que estareis en él, a todos, gracias, sin vosotros el habría naufragado.

El Pirata sin Cabeza

Rueda por la playa de los Loros, —entre las bocas de los ríos Jesús María y Grande de Tárcoles,— una leyenda que se afirma en la nebulosa historia de nuestra época colonial, y que alimentan cada año los pescadores o los peones salineros mientras descansan de sus faenas contemplando el maravilloso paisaje que, al ocultarse el sol se admira desde el Peñón de Tivives.

Cuenta la leyenda dicha que: cuando Sharp y Dampier pirateaban en el Mar de Balboa sembrando el terror en las Colonias Españolas, acostumbraban adentrar sus faluchos en el río Jesús María para descansar seguros y reparar averías. En el Peñón dejaban centinelas vigilando el horizonte, y mientras unos trabajaban, cazaban otros y todos bebían, los jefes planeaban la próxima correría.

Un día de tantos llegó del sur Dampier cargado de tesoros; tan grandes y valiosos eran que la codicia llenó su pensamiento y resolvió ocultarlos para lograrlos solo. Su plan confió en secreto al compañero que más temía, un viejo pirata corazón de hiena y punas de acero, e hijo del Diablo —según se decía— ofreciéndole compartir la presa. Ya puestos de acuerdo, con engaños enviaron sus hombres al Peñón de los vigías y entre los dos pasaron el tesoro a la rivera; al pié de corpulento "guanacaste" cavaron hoyo profundo y en cascada amarillenta allí cayó el botín. Pero... recordó Dampier que secretos entre dos no son secretos y su puñal, cien veces asesino, a traición clavó en el ladrón compañero. Cayó el pirata moribundo y expiró invocando a su padre Satanás; éste llegó, -se metió dentro del muerto y por su boca... Aquí! gritó. Tembló Dampier. Requirió su sable y de medroso y terrible tajo separó del tronco la cabeza del muerto, que rodó y rodó cayendo en el hueco del tesoro. Ya no hablarás! dijo el traidor, pero... oh poder del Diablo! El cuerpo del pirata sin cabeza del suelo levantó, extendió hacia la mar su brazo y... Aquí! gritó. Huyó Dampier horrorizado hacia el Peñón de los Vigías llamando compañeros... y el cuerpo sin cabeza tras él corría — Aquí! gritando...Aquí!

Contemplaron los piratas el macabro espectáculo. —Les llenó el espanto.— Volaron al falucho. Las anclas levaron. Al ancho mar huyeron temblando de pavor, y en el Peñón quedó hacia la mar tendiendo el brazo, como un fantasma horrible, el pirata sin cabeza... aquí! gritando... aquí!.

Y en la rivera izquierda del río Jesús María quedó el tesoro guardado, al pié de corpulento "guanacaste" que el hijo del Diablo cuida. Y la sombra del fantasma, del pirata sin cabeza aguarda un hombre sin miedo para partir las riquezas.

Cuentan los viejos pescadores que para las lunas llenas —al llegar la media noche— en el Peñón de Tivives un fantasma sin cabeza, que lanza un grito extraño, por las rocas se pasea. Y que para el mes de octubre, cuando por el río Jesús María bajan corrientes, una lancha misteriosa que nadie maneja, domina las corriente.-, y quietecita se queda, frente a un viejo "guanacaste" que se encuentra en la rivera.

Tal es la leyenda que en el "Peñón de los Vigías" duerme en los inviernos y los veranos despierta, cuando viejos pescadores admiran el bello paisaje, que al ocultarse el sol se contempla desde el Peñón de Tivives.

Angelica Black

Cuaderno de bitácora: día XXXVII

Consecuencias de la piratería

No siempre sus actos han sido tan 'malos' ...
se traducen en incendios, saqueos y muertes; ello obliga a militarizar las islas con las consiguientes cargas sobre la población, y como medida de precaución, las villas y poblados se asientan en lugares no visibles desde la costa. Por otro lado, muchos archivos y obras de arte desaparecen por los incendios, provocados por los Los ataques piratas a villas y puertos con fines de capturar tesoros o apoderarse de víveres y vinoscorsarios. Sin embargo no siempre las escuadras piratas venían en son de rapiña. Muchas veces lo hacían con la finalidad de practicar el contrabando con los naturales isleños; ciertos magnates canarios debieron su fortuna a este comercio clandestino con los piratas a lo que las autoridades hacían la vista gorda. La cuestión era sobrevivir en un espacio insular a medio camino entre las colonias americanas y la metrópoli española. Otras veces, los ataques tenían sencillamente motivaciones políticas.
Yo, como todos los que me seguis sabeis, considero que estas personas eran seres verdadermente fascinantes. No olvido que muchas veces saquearon, mataron, robaron y realizaron una gran serie de actos delictivos teniendo como víctimas en muchas ocasiones a personas inocentes, pero no obstante todo esto queda como parte de su 'cultura' o su historia.
Sinceramente si los piratas se hubieran dedicado a pasearse con sus navios por los mares sin protagonizar todos los actos de acción que hoy por hoy conocemos... habrian tenido algún atractivo para nuestros ojos? por supuesto que no... no quito la culpa de que muchas cosas estuvieron mal... pero son esas 'cosas' las que les hace mñas interesantes y más atractivos, al menos para mi.
En futuras entradas tengo la idea no solo de volver a retomar la narración de biografías de piratas conocidos como hice hace tiempo, si no de relatar también algunas de sus fechorias (reales, han quedado testimonios escritos) que he encontrado en algunos libros, pero para ello me gustaría saber vuestra opinión.
Por último, quiero decir a los que me siguen, que mi blog 'personal', mi pequeño pais de Nunca Jamás lo he cerrado teporalmente ( y puede que sea definitivo). En su lugar he decidido embarcarme en una nueva aventura paralela a la de este blog que espero pueda llegar a buen puerto y no se hunda en el camino.
Un vezz más, gracias piratas por navegar siempre conmigo

Cuaderno de bitácora: día XXXVI

Las banderas pirata. IIª parte

Os dejo el resto de las banderas ^^ que las disfruteis













Thomas Tew














Walter Kennedy
















Edward Teach, «Barbanegra»
















Richard Worley
















Christopher Moody















Edward Low










Os dejo también el link a mi devian, recien estranado hace unos dias, a medida que haga más cosas las ire colgando ^^ http://angelica-black.deviantart.com/
un beso

Cuaderno de bitácora: día XXXV

Las banderas pirata. Iª parte

Despues de mucho tiempo ausente (unas pequeñas 'vacaciones' de desconexión del blog a las que se le sumaron problemas con mi conexion ¬¬ ) la capitana a vuelto.. y prometo no irme esta vez ^^
He preparado para mi vuelta iuna entrada sobre historia de las
principales banderas pirata ^^ espero que os guste

Las banderas piratas estaban pensadas para infundir el miedo a las victimas antes del abordaje. Las más antiguas solían ser de un único color, generalmente rojo o negro, o en el caso de los corsarios la insignia de cada país. Más tarde empezaron a aparecer los símbolos terroríficos como calaveras, huesos, armas blancas, etc. Algunas de ellas contenían también un reloj de arena, que indicaba en este caso que el plazo dado por los piratas a la tripulación atacada para que se rindiesen se estaba agotando. «Rendíos mientras estéis a tiempo, si no, lucharemos sin cuartel» pretendía ser su mensaje.
La siguiente imagen es de una bandera real conservada en un museo:

A las banderas piratas se las conocía en entre los anglo-parlantes con el nombre genérico de Jolly Roger. El orígen de este nombre es incierto pero la teoría más extendida es que se trata de una palabra originalmente francesa: jolie rouge, que significa bonito rojo en referencia a las primeras banderas que solían ser de color sangre, y que terminó degenerando en inglés en jolly roger.

Muchos piratas tenían su propia bandera aunque muchas se repetían de tripulación en tripulación. En las banderas que podéis ver a continuación, el nombre y el apodo que figuran debajo, son los del pirata más popular que la enarbolaba (o del único que la enarboló en algunos casos).












Bartholomew Roberts,
«Bart el Negro»














Bartholomew Roberts,
2ª bandera













Edward England - Clásica














Emanuel Wynne














Christopher Condent

















John Rackham,
«Jack el Calicó»
















Henry Avery,
«Ben el Largo»

















Stede Bonnet










Algunas banderas merecen un comentario, como es el caso de Bartholomew Roberts que poseía dos banderas. En la segunda de ellas aparecen dos calaveras que están sobre las siguientes siglas: ABH, A Barbadian's Head; AMH, A Martinican's Head. Este pirata tuvo enfrentamientos con colonos de estas islas (Barbados y Martinica) y por ello representaba en esa bandera que no tendría clemencia con ningún habitante de esas islas.

La bandera de Christopher Condent aparece en muchas fuentes con una forma triangular.

Henry Avery, o Every, se conoce que tenía dos versiones del mismo diseño de bandera, una de fondo negro como la representada y otra igual pero en color rojo.

Próximamente colgaré el resto de banderas ^^